Título: El Ruiseñor
Autor: Kristin Hannah
Editorial: Suma de Letras
Primera edición: Febrero 2016
Nº Páginas: 589
ISBN: 97884836658284
Género: Ficción histórica.
Autora
Kristin Hannah nació en 1960 en el sur de California. Aunque estudió Derecho, con la publicación de su primer libro, en 1990, se convirtió en una escritora profesional.
Desde entonces ha ganado numerosos premios y ha publicado 22 novelas de gran éxito en Estados Unidos.
Vive con su marido y su hijo en la región del Pacífico Noroeste y Hawai.
Sinopsis
Francia, 1939. En el tranquilo pueblo de Carriveau, Vianne Mauriac se despide de su marido, Antoine, que debe marchar al frente. Ella no cree que los nazis vayan a invadir Francia, pero lo hacen, con batallones de soldados marchando por las calles, con caravanas de camiones y tanques, con aviones que llenan los cielos y lanzan bombas sobre los inocentes. Cuando un capitán alemán requisa la casa de Vianne, ella y su hija deben convivir con el enemigo o arriesgarse a perderlo todo. Sin comida ni dinero ni esperanza, Vianne se ve obligada a tomar decisiones cada vez más difíciles para sobrevivir.
La hermana de Vianne, Isabelle, es una joven rebelde de dieciocho años que busca un propósito para su vida con toda la temeraria pasión de la juventud. Mientras miles de parisinos escapan de la ciudad ante la inminente llegada de los alemanes, Isabelle se encuentra con Gaëton, un partisano que cree que los franceses pueden luchar contra los nazis desde dentro de Francia. Isabelle se enamora completamente pero, tras sentirse traicionada, decide unirse a la Resistencia. Sin detenerse nunca para mirar atrás, Isabelle arriesgará su vida una y otra vez para salvar a otros.
En el amor descubrimos quiénes queremos ser.
En la guerra descubrimos quiénes somos en realidad.
Opinión
Este precioso libro me tocó en el sorteo de la lectura conjunta que hicieron tres blogs, y como siempre que he participado, ha sido un placer. En este caso mi ejemplar es el que sorteaba Lunilla de El templo de la Lectura
Tengo que decir que el libro tiene numerosos premios y ya está entre los elegidos para los mejores del año, algo que ya me hizo que me fijase en él. Pero independientemente de eso, otra de las razones por las que me llamó poderosamente la atención, es su portada, me parece muy llamativa con el fondo lluvioso de una Torre Eiffel difuminada, tal como quedó Francia en los años que estuvo ocupada, y con la silueta de un ruiseñor sobre un rosal en dorado. En este caso, una imagen vale más que mil palabras.
La historia comienza en Oregon en 1995, cuando una anciana busca en su baúl sus recuerdos, y comienza a bucear en su memoria…y nos trasladamos a 1939, a Francia, poco antes de que comience la invasión alemana.
En un pequeño pueblo francés, Carriveau situado en el valle del Loira vive Vianne Mauriac con su marido Antoine y su pequeña hija Sophie. Viven felices y al margen del mundo sin creer que los vientos de guerra que se escuchan puedan afectarles, pero la realidad les golpeará duramente, Antoine es llamado a filas y deberá dejarlas solas.
Mientras tanto Isabelle Russignol, la menor de las hermanas ha vivido de internado en internado, unas veces escapándose y otras siendo expulsada, ahora acaba de llegar de nuevo a París a casa de su padre, que una vez más se deshará de ella montándola en el tren y mandándola a casa de su hermana. Durante el viaje de tren conocerá a Gaëton, por el que sentirá una atracción inmediata y que la ayudará durante el bombardeo que sufren. Será en este momento en el que Isabelle vea que la lucha contra los nazis será el motor de su vida.
Cuando llega a Carrieveau las cosas no están mejor, la línea Maginot ha caído, y ellos están en la zona bajo control nazi, unos nazis supuestamente amigos según Vichy, que pronto empezarán a dejar ver su peor cara.
En la casa de Vianne se alojará un oficial nazi, Beck, lo que dará lugar a situaciones muy comprometidas entre las dos hermanas, y mostrándonos además que buena y malas personas, las hay en todos sitios.
Vianne se enfrenta a la ocupación con entereza y miedo a la vez, parecerá sumisa y hará todo lo posible por cuidar a su hija, su bien estará por encima de todo; eso y la esperanza de que Antoine sobreviva tras ser detenido serán los motores que la mantengan en pie soportando humillaciones y largas colas para conseguir lo más básico.
Isabelle por el contrario, mucho más rebelde, loca e independiente no encontrará obstáculos para ejercer una oposición mucho más peligrosa enrolándose en la resistencia francesa, encargándose de dar soporte a los huidos, hacer llegar noticias reales a los sometidos, y otros trapicheos.
Cada una de ellas tiene un fin, y una manera de llegar a él. Las dos demostrarán su valentía, su fuerza y su coherencia a lo largo de la larga lucha que les supone todo el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. Las dos llegarán lucharán, cada una con sus prioridades y sin saber una lo que hace la otra. ¿Cuál de ellas será más fuerte?
Tremendo dilema saber cuál de las dos es la heroína, a unos les parecerá Vianne, a otros Isabelle, yo me debatía entre afinidades por momentos, pero me ha ganado el corazón Vianne, por ser madre y saber ser madre, por su lucha callada, su fuerza vital, su empatía con los seres humanos, sean nazis, judíos o franceses y por su lucha total por Ari.
En cuanto al resto de la historia, puedo decir que en muchos momentos me podía la desesperación, la rabia por lo que pasaba, he recordado esa parte tan negra y tan oculta que Francia y los franceses se ocupan de dejar bien oculta bajo la alfombra. Porque se enorgullecen mucho de la resistencia, pero también tuvieron la parte oscura del gobierno de Vichy, las historias de colaboracionistas, de gendarmes que fueron los tentáculos de Hitler cuando separaron a los judíos para expulsarlos de Francia en el penoso episodio del Velódromo francés…
Y lo que más me ha gustado es que es una novela de mujeres en guerra, mujeres que viven y sobreviven en retaguardia, que luchan sin pausa por sacar a sus familias adelante, que educan a sus hijos, que les protegen, y que tienen menos armas, pero son vencidas y humilladas y la Historia no las recuerda lo suficiente.
No voy a daros más motivos para leerlo, creo que son suficientes y sobrados, es precioso, tierno, duro, complejo y arrasa, así que solo recomendaros que no os perdáis por el camino y que cuando enfiléis las últimas páginas vayáis a por un paquete de pañuelos, creo que os harán falta…
Saludos y a leer.
Muchas gracias a los blogs organizadores y a Suma de letras por el ejemplar que tanto me ha hecho disfrutar.
