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lunes, 24 de abril de 2017

LAS MONEDAS DE LOS 24 de Juan Pedro Cosano



Título: Las monedas de los 24

Autor: Juan Pedro Cosano

Editorial: Martínez Roca

Primera edición: Marzo 2017

Nº de páginas: 512 págs

ISBN: 9788427043275

Género: Novela negra, histórica





Autor
El abogado Juan Pedro Cosano (Jerez, 1960), casado, con dos hijos, accedió al mundo editorial en 2014, cuando su novela El abogado de pobres (Martínez Roca), mereció, por unanimidad del jurado, el «V Premio Abogados de Novela». Le siguieron Llamé al cielo y no me oyó (Martínez Roca, 2015), segunda entrega de las aventuras de Pedro de Alemán, el abogado de pobres del Jerez del siglo XVIII, un personaje soberbio que ha cautivado a miles de lectores; y La fuente de oro (Espasa, 2016) un aplaudido melodrama que retrata el mundo bodeguero jerezano durante los años treinta del siglo pasado. Anteriormente había publicado la novela histórica Hispania (Ed. Ópera Prima, 2003), el poemario La noche calma (Edición Personal, 2007) y la novela negra Las muertes pequeñas (2009).

Sinopsis

Un asesino en serie y una auténtica investigación forense en la que el protagonista arriesga más que su vida.
Esta novela, que se puede leer de forma independiente, es la tercera entrega de las peripecias de Pedro de Alemán y Camacho, abogado de pobres de la ciudad de Jerez a mediados del siglo XVIII y protagonista de El abogado de pobres (Premio Novela de Abogados 2014) y Llamé al cielo y no me oyó.
Al comienzo de esta historia, Pedro se ve obligado a aceptar la defensa de un rico artesano de Jerez, que ha sido acusado de violación por su bella y joven sirvienta. Paralelamente, empiezan a producirse en la ciudad unos crímenes terribles: varias muchachas, relacionadas con las casas más nobles de Jerez, son asesinadas de una manera especialmente violenta y en cada escena del crimen se encuentra una moneda romana.

Opinión

El libro que hoy reseño ha llegado a mis manos en el marco de la Yincana Criminal 2017 y tengo que dar gracias, porque me ha descubierto a un personaje y a un autor que no conocía y que me ha dejado fascinada.

Nos situamos en Jerez de la Frontera en Abril de 1757, Viernes Santo. Dionisia Menéndez regresa de trabajar en la casa del veinticuatro don Jerónimo Enciso del Castillo y es brutalmente asesinada y profanada. Todo apunta a que el asesino puede ser su marido Francisco Porrúa, que de forma habitual la maltrata.

El abogado de pobres Pedro de Alemán será el encargado de defender al acusado. A la vez está asistiendo como letrado al veinticuatro Antonio Galera que se acogió a sagrado al ser acusado por su sirvienta, Evangelina González, de violación. Este último caso lo lleva y ejerce de forma ajustada a derecho y a los intereses de su cliente, pero en contra de lo que le dicta su conciencia. Ley y justicia no van siempre a la par y su buen hacer como abogado le creará numerosos problemas de conciencia.

¿Y qué es un abogado de pobres? Aquí nos vamos a encontrar con una curiosa figura que se trata de un letrado al que se encargaba la defensa de aquellos que no tenían medios para pagar los honorarios de un abogado privado, vamos lo que podría ser nuestros abogados de oficio actuales. Otra pregunta más que nos surge es ¿qué es un veinticuatro? Al parecer se trataba de una curiosa forma de nombrar a los antiguos regidores de ciertas ciudades, como es en este caso Jerez de la Frontera, cargos que en unos casos se adquiría por méritos y en los más por herencia.

El caso de Francisco Porrúa también se complica porque a pesar de que él está convencido de su inocencia y que comienzan a aparecer indicios de que el asesino es otro, la justicia en este caso mira para otro lado y se necesita dar un escarmiento a través de un cabeza de turco, y será condenado a muerte.

Paralelamente la ciudad vuelve a estremecerse con otro brutal asesinato, en este caso el de una costurera relacionada con otro de los veinticuatros. En común con el caso anterior tiene la forma salvaje de haber acabado con su vida, y que en el lugar del asesinato aparece un antiguo denario de plata romano. Lo que en el primer caso pudo deberse a la casualidad, en este segundo ya parece que se trata de una firma.

El atribulado Pedro debatiéndose en un tremendo dilema moral y de justicia intentará por todos los medios averiguar quién es el asesino y sobre todo convencer al juez y a las autoridades de que se encuentran ante un asesino en serie que puede seguir actuando con impunidad ante la pasividad de los jueces y fiscales, siempre luchando contra el tiempo y aquellos que intentan ponerle zancadillas.

Se convertirá en investigador y acompañado por su procurador, Jerónimo de Hiniesta y otros personajes secundarios, realizará todo un proceso deductivo que tiene como base las monedas que se van encontrando junto a los cadáveres de las mujeres que van apareciendo asesinadas.

Gracias al personaje de Pedro y sus andanzas por el palacio de justicia también tendremos un thriller jurídico con una ambientación cuidada al mínimo detalle, con unos procesos judiciales que nos muestran la complejidad del sistema por el que se que se regían durante el siglo XVIII, donde se aprecia una soterrada crítica hacia aquellos que deben hacer cumplir las leyes que no se muestran igual de raudos a la hora de solucionar los casos de distintas clases sociales.

Con todos estos ingredientes y con un estilo característico, un lenguaje de la época, plagado de dichos y refranes que te sacan la sonrisa en más de una ocasión y hace un libro de intriga que no puedes parar de leer, te lleva de viaje por Jerez de la Frontera y te hace un recorrido histórico, en un todo en uno que ya quisiera para sí la mejor agencia de viajes.

Como negativo solo puedo decir que a veces los soliloquios y las torturas mentales de Pedro me han cansado un poco, y que en alguna ocasión me ha agobiado la cantidad de personajes, pero eso no es problema del autor ni del libro, sino de mi propio estado, y el hecho de leerlo en digital que me resulta más dificultoso.

En conclusión un libro para dejarse llevar, aprender historia y disfrutar, que gustará tanto a los amantes de la novela histórica como a los que buscan una novela de intriga, y que recomiendo sin lugar a duda. Seguro que volveré a leer a este autor.

Con este libro participo en la Yincana Criminal en la casilla correspondiente a aquellas novelas que transcurren en la antigüedad.

"Pena por sí mismo, pena por la justicia del rey, pena por las leyes de los hombres, pena por el mundo que le había tocado vivir. Ese mundo en el que la palabra de una dama era prueba y la de una criada era sólo duda."

"Y la culpa se le enredó con la pena hasta convertirse en ira."

"La justicia no busca la verdad, por Dios bendito. Sólo la apariencia, don Pedro, sólo la apariencia."

"El consejo es de las cosas más fáciles de dar y más difíciles de recibir."

Saludos y a disfrutar leyendo.