viernes, 3 de junio de 2016

TREINTA POSTALES DE DISTANCIA de Sara Ventas


Título: Treinta postales de distancia 

Autor: Sara Ventas

Editorial: Diéresis 

Primera edición papel: 2015

Número de páginas: 264

ISBN: 9788494295911

Género: Novela Romántica, chick-lit



Autora

Sara Ventas cursó estudios como técnico en imagen fotográfica, pero solo se dedicó profesionalmente a la fotografía durante tres años. Su interés por la escritura surgió a raíz de un blog, Sueños a contraluz, que creó a principios de 2010. Aunque, según ella misma afirma, tal vez fue al contrario y comenzó con el blog porque ya le interesaba el mundo de las letras. Sea como fuere, en él están registrados sus comienzos como autora. 
Treinta postales de distancia, de género romántico contemporáneo, es su primera novela, que pasó más de un año uno de los ebooks autopublicados en internet más vendidos en España. Este éxito ha llevado a que se haya traducido al inglés y publicado en Estados Unidos con el título de Thirty Postcards Away. 



  
Sinopsis

Sofía es alocada, divertida y desordenada. Jaime es organizado, metódico y supersticioso. Sofía acaba de dejar a un novio que no la merecía y no quiere que le vuelvan a romper el corazón. Jaime acaba de divorciarse y huye del compromiso. Nada hacía pensar que dos personas tan opuestas pudieran enamorarse. Hasta que ambos coincidieron en aquel ascensor. Pronto Jaime y Sofía se darán cuenta de que, a veces, los polos opuestos se atraen irremediablemente. Aunque hay otras personas en sus vidas, y no se lo van a poner nada fácil: novias celosas, ex que vuelven, amigas que no lo son tanto La vida va a complicarse mucho para Jaime y Sofía, tanto que al final su relación dependerá del contenido de unas misteriosas postales.




Opinión

Como siempre digo, los libros tienen su momento y el que hoy comento lo había visto mil veces en los primeros puestos de Amazon, y aunque me hacían gracia la portada y la sinopsis no fue hasta esta pasada Feria del libro de Málaga, en la que conocí a su autora que me puse a leerlo. Necesitaba algo ligero, que me ayudase a desconectar totalmente de mi realidad, y con él lo he conseguido.

Y es que detrás de este título tan singular nos encontramos una novela que se lee casi en un instante, con unos personajes muy diferentes, una trama bastante alocada y una ambientación que me es tremendamente cercana, ya que tiene lugar en Málaga.

Sofía se acaba de mudar a Málaga tras romper su relación. Ha encontrado piso y trabajo, intenta establecerse y vaciar sus cajas una y otra vez, mientras queda con un amigo que le aporta una cierta serenidad y cordura, Manu.

En el largo trayecto del ascensor de su edificio, vive en un piso trece, (fuera las supersticiones, de las que tendremos una buena lección) coincide con un estirado vecino, Jaime que tiene su vida escrupulosamente trazada tras un divorcio con infidelidad incluida y novia nueva.

Son unos ingredientes típicos, pero el planteamiento resulta muy agradable. Sabremos gracias a un narrador omnisciente qué pasa por la cabeza de cada uno de los protagonistas, mostrándonos lo desastrosas que pueden llegar a ser las opiniones a primera vista.

Con unos divertidos malentendidos y enredos, en los que se piensa más que lo que se dice y se sobreentienden demasiadas cosas, comienza una historia de algo parecido al amor, en la que las omisiones también son protagonistas.

Los jaleos que Sofía monta en su cabeza, con esa forma de ser tan atolondrada y tan directa, junto con los miedos que Jaime mantiene en la suya, nos harán pasar unos ratos bastante divertidos, y mientras los equívocos van hilando una amistad que a lo mejor  puede acabar en algo más, iremos de gira turística por Málaga, visitando el mítico El Pimpi, la calle Larios, la Alameda y otros lugares emblemáticos, donde comeremos y tapearemos a placer.

¿Qué ocurrirá? Lo tenéis en unas pocas páginas llenas de amenos y creíbles diálogos. Y ahí descubriréis porqué a pesar de vivir en el mismo edificio, hay treinta postales de distancia.

Un libro con sabor a verano y tardes de playa.

Una autora que no conocía, que me fue recomendada por una amiga común, Mayte Esteban y que volveré a leer.


Nada es lo que parece y el peor de los sentimientos es el miedo.




Saludos y a leer.