viernes, 16 de abril de 2021

CUANDO FUIMOS DIOSES de Olga Romay

 

Título: Cuando fuimos dioses

Autor: Olga Romay

Editorial: Corona Borealis

Colección: Narrativa de misterios

Nº de Páginas: 412

Primera edición: 9 de diciembre de 2020

ISBN: 978-8412250817

Género: Narrativa, histórica

Sinopsis

A la muerte de Alejandro Magno en Babilonia, Ptolomeo engaña a los demás generales y roba el cadáver del rey. Sigue las órdenes de Alejandro Magno, cuyo espíritu se niega a abandonar el mundo de los vivos. En Egipto le espera a Ptolomeo un mundo deslumbrante de riquezas y conspiraciones: los macedonios desean su reino, los sacerdotes recuperar la antigua gloria del país del Nilo y las mujeres aspiran a convertirse en concubinas y esposas.
Un viaje al Egipto de la última dinastía faraónica.

Autora

Olga Romay nacida en Lugo. Máster en Historia Antigua ejerce como profesora en la Comunidad de Madrid. Colaboradora en la revista Clío Historia y en la revista Más Allá. Es
articulista en prensa y en diferentes medios de comunicación. Escritora prolífica y entre sus libros destacan Los hijos del senador, El Jugador de Ajedrez y Pericles, El Primer Ciudadano.


Opinión

La novela que hoy traigo me ha llevado a una parte de la Historia que siempre me ha fascinado, las transiciones entre las grandes culturas, siempre he pensado lo difícil que debía ser tener los pies asestados en unos principios, con unas costumbres y unos dioses, y luego por una invasión, todo va a ser sustituido o arrasado. En este caso nos vamos a finales del siglo IV a.C.

Cogemos la imaginación, un libro con una ambientación espectacular y viajamos a Babilonia. Ya el mundo griego está siendo englobado por el imperio persa, hay fuertes choques de culturas. Alejandro Magno ha conseguido conquistar muchas tierras y ahora está casi agonizando, no ha dejado un heredero claro, hay varios que se disputarán el trono y revolotean como buitres esperando poder hacer lo que quieran en cuanto exhale el último suspiro. Un inmenso reino que ha costado unir, que se repartirán sin pudor alguno. Ptolomeo ha sido su mano derecha durante mucho tiempo, lo ha acompañado en batallas cruentas y en amoríos, porque ha sido un conquistador en todos los sentidos.

Pérdicas y Filipo son los candidatos más claros por parte de los generales, pero también tiene un pequeño aspirante de su esposa Roxana, y no van a estar dispuestos a estar gobernados por un regente.

Ptolomeo se siente devastado por su muerte, era su gran amigo y tendrá que hacer algo que no va a gustar a ninguno de los generales, tiene que cumplir con su último deseo que es ser enterrado en Egipto. Pero una vez muerto su cuerpo se va a convertir en un símbolo también muy codiciado, con unas exequias grandiosas lo van a despedir, y Ptolomeo tiene que tomar la decisión de robar su cadáver y dirigirse a Menfis.

Obviamente no lo va a tener nada fácil, las intrigas se van a suceder sin cesar, hay un choque de culturas. Los macedonios son un pueblo guerrero y ambicioso dominado por los que han sido generales de Alejandro, no entenderán lo que hay en Egipto un pueblo mucho más espiritual, con sus sacerdotes y sacerdotisas, lleno de símbolos y dioses a los que no conviene hacer enfadar.

Lo que deja atrás son una retahíla de divisiones, asesinatos, envenenamientos, alianzas, matrimonios de conveniencia que intentarán mantener unido un imperio que tras la muerte de su líder comienza a agrietarse. Ante sí tiene el reto de ejercer como cónsul de Egipto, hacer habitable su palacio de Menfis y comenzar a construir Alejandría. Deberá dejar sus impulsos y sus arrebatos y tendrá que comenzar a ejercer la diplomacia para no herir sensibilidades y eso no será nada fácil.

Además de la Historia, hay numerosas historias que como pequeños mundos van a ir deslizándose sobre las aguas del Nilo. Conoceremos a Ipue, Nimlot, Cleómenes y un sinfín de personajes que, aunque pueda parecer lioso a priori, están muy bien descritos y tienen unas personalidades bien diseñadas por la autora, lo que hace que sepas en todo momento quién es quién.

Los personajes femeninos se caracterizan por ser utilizados como moneda de cambio a través de los matrimonios, cuando no del poder que les da el sexo, como es el caso de las hetairas, unas se amoldarán, otras se sentirán humilladas y otras sacarán las uñas por ellas y los suyos.

La ambientación está muy bien lograda sin ser agotadora en los detalles, se puede sentir el calor y el polvo, la humedad cerca del río, la brisa que corre entre los jardines, la magnificencia de los palacios y los templos.

La única pega es que se termina…y quieres saber más, necesitas saber qué es lo que va a ocurrir con todos ellos, y para ello tienes que esperar a la segunda parte. Y no vale eso de googlear porque lo de menos es lo histórico, lo que ansías es saber qué piensan y qué les ocurre con el tiempo.

No sé si se nota que me lo he pasado como los indios, pero por si acaso lo aclaro, me ha encantado, me ha resultado una lectura envolvente y fascinante, que a pesar de las páginas se me ha escapado entre las manos y me ha servido para disfrutar y para aprender mucho.

En resumen, una historia novelada llena sacerdotes, eunucos, generales, cortesanos y hetairas. Un mundo de intrigas palaciegas, amores y odios, pasiones y estrategias que te llevan al final de una civilización, mostrando la parte más humana de las grandes gestas. Si te gusta la historia la vas a disfrutar, seguro.

“Para la persa, un esposo no tiene entre sus funciones parlotear con su mujer. Debe limitarse a engendrar hijos y proveer el hogar.”

“Un judío no sabe hacer otra cosa: son banqueros o tenderos. Son malos agricultores, pésimos pescadores y el ganado nunca les engorda como a otros pueblos. Si su padre hubiese oído lo que ahora pensaba de su raza, le habría echado por segunda vez de Jerusalén.”


Con este libro lleno de muertos voy a rellenar la casilla correspondiente a La acción transcurre en África o está escrita por un escritor/a africano, correspondiente a la Yincana Criminal 2021.



Saludos y a leer siempre.