SIN LATIDO de Yolanda Cruz Ayala

 

Título: Sin latido

Autora: Yolanda Cruz Ayala

Editorial: N de Novela

Primera edición: 8 de mayo de 2024

N.º de páginas: 482

Género: policiaca.

Sinopsis

Una joven es encontrada sin vida en la ciudad costera de La Línea de la Concepción. ¿Suicidio, homicidio o accidente?

Olivia, una brillante psicóloga, tiene en su poder las claves para saber qué ha sucedido. Emprende su propia búsqueda y, al descubrir que personas muy cercanas a ella pueden estar involucradas, pone su vida en riesgo. La policía inicia la investigación al mismo tiempo, pero la historia se complica cuando las vidas de Olivia y el inspector al mando se cruzan.

Una bruma de sucesos turbios envolverá a los personajes en una trama que avanzará sigilosamente hacia una resolución intensa. Esta obra de suspense te sumergirá en los recovecos más sombríos de la mente humana y demostrará que la verdad siempre sobrevive a la muerte.

Autora

Yolanda Cruz Ayala nació en Gibraltar y creció en la ciudad de La Línea de la Concepción, donde vive actualmente. A pesar de haber desarrollado su formación académica y profesional en el ámbito de la
administración de empresas, siempre ha mantenido viva su pasión por la literatura. Para ella, escribir no es simplemente una actividad, es un compromiso con la imaginación y la expresión artística. En el año 2013 fue una de las diez finalistas del Premio Planeta con la novela Mermelada de pétalos de rosas; también ha publicado las novelas Cristales en el cielo de Manhattan y El sonido de las estrellas, y forma parte del Centro Andaluz de las Letras, un organismo especializado en el fomento y la promoción de la creación literaria.

Opinión

Hay novelas que te atraen desde el primer momento y esta es una de ellas, tanto me atraía que incluso adelanté su publicación y todo, las ansias me podían, y mi mala cabeza hizo el resto. El hecho de que estuviera ambientada en La Línea, también me resultó llamativo. Os cuento lo que me ha parecido.

Olivia es una psicóloga que pasa por un mal momento, el hecho de que un paciente suyo se suicidase tras salir de su consulta la ha dejado tocada y está especialmente sensible con el tema. Cuando recibe un correo electrónico de Celeste, una antigua amiga que formó parte de su adolescencia, en el que le habla del pasado, de sus amigos y de su relación con Álex, su hermano, ella queda descolocada, y sin pensárselo dos veces va a visitarla para averiguar de qué habla. Con lo que no cuenta es que cuando llega a su casa ella está muerta. Es una impresión tremenda porque no sabe ni ella ni la policía si se trata de lo que parece, un suicidio, o un asesinato, o incluso un accidente. Las coincidencias se suceden cuando el inspector al cargo de la investigación Rodrigo Ugalde es un tipo al que ha conocido cuando sale a correr habitualmente. Se ve ante la disyuntiva de callar e investigar por su cuenta o contar lo que ha pasado. El hecho de que su hermano esté por medio la hace callar.

De ahí en adelante Olivia va a ir leyendo el relato de la vida de Celeste, sus impresiones y sus dudas sobre algo que ocurrió en el pasado y que afecta a todos ellos en el presente. Ese algo parece iniciarse con la extraña muerte de Miguel, otro chico de la pandilla.

Comenzará una carrera entre los principales protagonistas en la búsqueda de la verdad, Olivia libremente y a su bola, aunque con la ventaja de saber cómo se sentía Celeste y qué le ocurría, y Rodrigo con la fuerza de la ley y más recursos. Como encima los dos se gustan, pero tienen miedos y silencios, es complicado que la cosa cuaje.

Por el camino tenemos otra protagonista que da gusto apreciar, y es La Línea de la Concepción, la ciudad y su gente, no esa que siempre sale en las noticias en relación con el narcotráfico y…el narcotráfico, sino la de a pie, llena de belleza, de luz, de rincones poco conocidos, de crisol de nacionalidades como unión, no como desunión.

Y mientras va transcurriendo la investigación se van tocando temas que dan mucho que pensar, el suicidio, la homosexualidad, las incertidumbres, los silencios y el daño tan increíble que estos producen. Las relaciones tóxicas, el acoso, las denuncias y los protocolos que marca la ley, que no son los que se dictan a golpe de titular periodístico…Y el más importante que no os voy a contar porque es el eje central de la historia y que tengo que reconocer que no vi venir, pero que está perfectamente integrado y explicado, aunque me ha sabido a poco.

Un pero, algo que a mí me parece inconcebible, como persona curiosa que soy: Yo no podría haber tardado tanto en leer el relato de Celeste, yo lo hubiese devorado, la paciencia no es lo mío, claro que entonces la novela no hubiese tenido mucho sentido, je,je,je. Otra cosa que me hubiese gustado ver más es el lenguaje de Herrera, los diálogos con él son mucho más creíbles y están llenos de expresiones de la calle y los he recibido como bofetadas de aire fresco y realidad, aunque sean políticamente incorrectos.

En definitiva, una novela policiaca intensa, ágil y bien escrita que consigue desarrollar unos personajes y una ambientación muy creíbles con un lenguaje y un ritmo muy visuales. La comienzas y la quieres acabar, pero es mejor recrearse en sus reflexiones. Me ha gustado bastante y la recomiendo.

“Cada persona construye su propia realidad, del mismo modo que cada historia hay al menos dos versiones.”

“La infidelidad era un engaño, una mentira que siempre lastima, hiere y la mayoría de las veces desencadena una tormenta que arrasa con todo.”

“Ya sabes cómo son los de la prensa, unos buitres que buscan titulares sensacionalistas.”

Saludos y nos vemos en los libros.