CON SUERTE… EN NAVIDAD de Mayte Esteban

 

Título: Con suerte…en Navidad

Autora: Mayte Esteban

Editorial: Harlequin HQÑ

Primera edición: 9 de diciembre 2021

N.º de páginas: 240

Género: chick-lit, romántica

Autora

Mayte Esteban nació en Guadalajara y reside actualmente en un pueblo de Segovia. Se licenció en Geografía e Historia por la Universidad de Alcalá de Henares y escribe desde que era muy joven. Es autora de seis novelas de diferentes temáticas: La arena del reloj (2011), Su chico de alquiler (2011), El medallón de la magia (2012) y Detrás del cristal (2013),
Brianda, el origen del medallón (2014) y La chica de las fotos (2017). Ganadora del premio RNR a la mejor novela sentimental por Detrás del cristal y quedó Finalista del III Premio Digital de HQÑ con su libro La chica de las fotos, que le supuso su publicación en papel. Su novela La colina del almendro (2019) ha sido toda una revelación. Y Años de mentiras (2020) una novela excepcional.

Sinopsis

Andrea Hervás trabaja en una galería de arte de Madrid. Está preparando la exposición estrella de las Navidades cuando recibe una llamada de su jefe: debe dejarlo todo y marcharse a Grimiel, un pequeño pueblo castellano, donde una vecina quiere vender un cuadro y es necesario que alguien lo valore. Andrea se lo piensa: es 22 de diciembre, tiene planes y se aproxima una gran nevada, pero calcula que, si se da prisa, podrá ir y volver en un día. Con lo que no cuenta es con que todo se confabulará contra ella y acabará atrapada en ese pequeño pueblo.

Un cuadro de Murillo, un coche viejo, una anciana gruñona, los ojos azules del chico de los tractores y la lotería de Navidad se mezclarán con una tormenta y demostrarán a Andrea que la verdadera suerte no está solo en que te toque la lotería.

Opinión

Hoy traigo una novela que leí durante el pasado mes de diciembre, en el que las circunstancias no fueron las más adecuadas y que a pesar de todo, o precisamente por eso, me encogió el corazón, me sacó más de una sonrisa y me hizo llorar mucho cuando leí por y para quién fue escrita.

Sabía que iba de nuevo a Grimiel, aunque no esperaba encontrarme a los personajes de La chica de las fotos, y mira que es difícil, porque en un lugar tan pequeño es de lo más normal.

Andrea se lanza a hacer su viaje de ida y vuelta para valorar un posible Murillo, pero el parte del tiempo dice que no se haga muchas ilusiones con eso de volver en el día; que encima toque la lotería en el pueblo, que el chico de ojos azules dueño del tractor que la puede sacar o no de allí, y que tiene en sus manos arreglar su coche se apodere de unos sentimientos dormidos son cosas del destino. Podría haberse negado, llamar una grúa o dedicarse al esquí, pero si le ponen en bandeja conocer a los habitantes del pueblo, pelearse con Luisa y su café, y luchar con Angustias, y que la coja de la cintura Fernando está clara la elección.

Sonrisas, un sentimiento de gratitud, y de cariño es lo que me ha provocado su lectura. Y como siempre, y tratándose de Mayte, no solo será cuestión de unos ojos bonitos y un beso robado, se abordará con tacto y crítica una situación que está en el candelero y que por desgracia pasa desapercibida a menudo, la despoblación de la España rural, la dura realidad a la que se ven sometidos tantos pequeños pueblos que se adaptan como pueden a la falta de servicios básicos. La vejez y la situación de las personas mayores también serán otros de los temas que con ironía se harán protagonistas.

Los personajes secundarios los borda y se hacen grandes en esa historia llena de pequeños equívocos que van a hacer que la novela vuele entre tus dedos, y eso que a mí me cuesta la misma vida leer en digital.

Puede que sea una novela escrita para las fiestas navideñas, pero es una gozada leerla en cualquier momento.

En definitiva, es una novela ligera, amena y simpática llena de diálogos chispeantes y con unos personajes a los que les tomarás cariño seguro. Totalmente recomendable.

“Te digo algo, el tiempo pasa sin que nos demos cuenta y, para cuando queremos arreglar algunas cosas que hemos ido dejando correr resulta que ya no lo tenemos.”

“Algunas personas jamás sienten lo que has sentido tú, ¿qué más da que hayas tardado tiempo en darte cuenta?”

Saludos, seguid leyendo y cuidaos.