Autor: Sue Townsend
Nº de páginas: 328 pg
Editorial: Planeta
Colección: Cuatrovientos
Primera edición en inglés: 1982
ISBN: 9788408090755
Género: Juvenil
Autora
Lillian
Susan “Sue” Townsend, nació el
02 de abril de 1946 en Leicester, Inglaterra, y escribió tanto novelas
como obras de teatro. Desde la publicación de El diario secreto de
Adrian Mole hace treinta años, todo un clásico de la literatura
juvenil inglesa, ha hecho reír y pensar a toda Inglaterra. Escribió siete
volúmenes de los diarios de Adrian Mole y otras cinco novelas muy populares,
así como numerosas obras de teatro, que han tuvieron una gran acogida entre el
público. Está considerada una de las mejores escritoras de Gran Bretaña. Entre algunos de sus títulos más conocidos figuran La reina y
yo (1992), Niños fantasmas (1997) o La mujer
que vivió un año en la cama (2012)
Falleció el pasado 11 de
abril de 2014 a los 68 años de edad, tras haberse quedado ciega debida a la
diabetes.
Sinopsis
Adrian Mole tiene trece
años y medio. También tiene un padre de cuarenta años que no sabe dónde está la
parada del autobús, una madre indecisa entre su marido y un vecino, una abuela
a la antigua usanza, un compañero que le extorsiona, un perro, una amiga que no
parece derretirse por su amor y varias revistas de chicas bajo el colchón. Con
un corrosivo sentido del humor, Sue Townsend transcribe las cáusticas
impresiones de un adolescente en su diario secreto.
Opinión
Había oído hablar de este
libro, que se convirtió en todo un referente en Gran Bretaña, y cuando un día
fui a la biblioteca, ni me paré a mirar quien era el público al que iba
dirigido, quizá si lo hubiese mirado a lo mejor no lo hubiese leído, y no me
habría pegado una panzada de reír.
Adrian es un chico de trece años y medio, que vive
en Leicester, intelectual y poeta atormentado como se autodefine, empieza a
escribir su diario con sus propósitos de año nuevo. Hablará del gran problema
médico que sufre, un enorme grano ha tomado posición en su cara y nadie lo entiende,
y mucho menos el médico de la seguridad social al que consulta. Nos hablará de
sus padre, George y Pauline, de los que se avergüenza, de su madre porque no lo
alimenta equilibradamente y porque últimamente tiene una vena feminista
protestona, mientras su padre se pasa la vida en el paro.
Va a contarnos como le manda sus poemas a la BBC;
como le contestan, ya él se encargará de gestionarlo con su ego.
Se enamorará perdidamente de una chica de su clase,
Pandora, que caerá rendida antes sus encantos cuando él se decida a
protagonizar un tremendo ataque de rebeldía en el colegio, al ponerse calcetines
rojos con el uniforme. Las conversaciones profundas entre Pandora y Adrian, son
sencillamente desternillantes. Por no hablar de la relación que mantiene con
sus vecinos.
La percepción que él tiene de qué ocurre en la casa
de al lado en relación con su madre es para llorar de la risa por su enorme
inocencia. Sus propósitos de hacer el bien con los ancianos desembocarán en una
relación como mínimo peculiar, con un viejo solitario y gruñón Bert Baxter.
Y en el contexto histórico, su fobia hacia Margaret
Tatcher, la guerra de las Malvinas, y sobre todo la boda del Príncipe Carlos
con lady Diana son dignos de leer descritos por este peculiar intelectual. La
crítica social e irónica, chapó.
Y le he cogido un cariño tremendo a pesar de que es
total y absolutamente repelente, quizá porque me reconozco en él, porque debe
ser de mi edad, y sus cosas eran mis cosas, más o menos. Por eso me he reído a
carcajadas y no dudo en recomendarlo para pasar un buen rato.
Lo malo, no ya del libro, sino de la sociedad, es
que ha envejecido mal, los niños de hoy día creo que serán incapaces de
comprender a un extraterrestre que se dedica a leer libros de peso, y a jugar
con sus amigos en lugar de estar chateando o jugando con las video consolas.
Descacharrante, no digo más.
“Jueves, 1 de enero
DÍA FESTIVO EN INGLATERRA, IRLANDA, ESCOCIA Y GALES
Éstos son mis propósitos para el Año Nuevo:
1. Ayudaré a los ciegos a cruzar la calle.
2. Colgaré mis pantalones.
3. Volveré a meter mis discos en sus fundas.
4. No empezaré a fumar.
5. Dejaré de apretarme los granos.
6. Me portaré bien con el perro.
7. Ayudaré a los pobres e ignorantes.
8. Después de tener que aguantar anoche los ruidos repugnantes que venían de abajo, he jurado también que jamás beberé una gota de alcohol.
DÍA FESTIVO EN INGLATERRA, IRLANDA, ESCOCIA Y GALES
Éstos son mis propósitos para el Año Nuevo:
1. Ayudaré a los ciegos a cruzar la calle.
2. Colgaré mis pantalones.
3. Volveré a meter mis discos en sus fundas.
4. No empezaré a fumar.
5. Dejaré de apretarme los granos.
6. Me portaré bien con el perro.
7. Ayudaré a los pobres e ignorantes.
8. Después de tener que aguantar anoche los ruidos repugnantes que venían de abajo, he jurado también que jamás beberé una gota de alcohol.
Durante la fiesta de anoche, mi padre emborrachó al perro
con aguardiente de cereza. Si se entera la Asociación Protectora de Animales,
se le puede caer el pelo. ¡Ya han pasado ocho días desde Navidad y mi madre aún
no se ha puesto el delantal verde que le compré! El año que viene, no le
regalaré más que sales de baño. Vaya suerte que tengo. ¡Me ha salido un grano
en la barbilla en el primer día del año nuevo!”
Con este libro participo en el mes temático de la familia, organizado por Libros que hay que leer.
Saludos y a leer