Autora: Mercedes Gallego
Editorial: Autoeditado
Primera edición: 2016
Saga: Candela Luque nº 4
Nº de páginas: 252
ASIN: B01EJVM3E6
Género: Policiaca
Autora
Ella se autodescribe en su
página http://www.mercedes-gallego.com/
Siempre quise ser
escritora porque para mí la lectura es una pasión; por eso deseaba crear mis
propias historias pensando en ofrecer a los demás las mismas horas de placer
que a mí me proporcionaban los libros que leía. Sin embargo, el tiempo iba
pasando y mi sueño aparecía lejano porque mis días estaban al servicio de la
supervivencia. Hoy por fin puedo hacerlo.
De mi padre, un periodista
y poeta bohemio, al que sobraban hijos, aprendí también el arte de escribir y
la afición por el género policíaco. Todavía llena mi biblioteca parte de la
suya, esos libros sobados y entrañables de Editorial Molino o la colección
Círculo del Crimen. Fueron mis hermanos -lo mejor que me ha pasado en mi vida-,
los primeros en soportar mis historias inventadas, que nunca podía repetir
porque no las escribía, sólo se las contaba.
Cuando decidí dedicar todo
mi tiempo a escribir pensé que una página Web ayudaría a la difusión de mis
novelas o al menos, ofrecería información sobre ellas y, perdiendo todo pudor,
también sobre mí.
Las series que escribo se
inscriben dentro de un género policíaco clásico con algún matiz negro. La
tranquilidad del lector queda compensada con la detención del culpable, aunque
a veces no sea uno sólo, porque la vida no es lineal y los delitos
individuales muchas veces dependen de jerarquías que por regla general quedan
impunes. Este aspecto lo recreo con más entusiasmo en la Saga de Candela Luque,
que arranca en 1976, años difíciles para España en los que se gestaron las
leyes que hoy todavía nos gobiernan, aunque muchas vayan sufriendo
modificaciones. La experiencia que relato es antigua, pero no vieja y el hecho
de haber formado parte de una historia a la que la memoria histórica no ha
llegado a ella pero la mía sí, me da cierta ventaja. Candela intenta recuperar
un hecho olvidado como fue El grupo Especial Femenino que en su momento
supuso un paso adelante en la igualdad de la mujer, algo que en 1974, cuando se
llevó a cabo, incluso las mujeres eran reacias a contemplar.
SINOPSIS
Año 1981. La vida en la Brigada Judicial con el Comisario
Salgado al frente, se halla desbordada de trabajo. La investigación por el
asesinato de una maestra recae en las inspectoras Candela y Virginia, sin
embargo, un pederasta irrumpe en la vida de Virginia, que no logra que los
padres denuncien al culpable. Con ayuda de Candela inician una investigación
por su cuenta que repercutirá en su trabajo cotidiano bajando el rendimiento.
La investigación sobre la muerte de la maestra se cierra poniendo a disposición un culpable, en contra del parecer de las inspectoras. Por otra parte, el contrabando de armas y droga en la Playa del Somorrostro de Barcelona, que investigan Manel y Diego, traerá consecuencias devastadoras para la Brigada, en una España secuestrada durante unas horas por un Teniente Coronel de la Guardia Civil.
La investigación sobre la muerte de la maestra se cierra poniendo a disposición un culpable, en contra del parecer de las inspectoras. Por otra parte, el contrabando de armas y droga en la Playa del Somorrostro de Barcelona, que investigan Manel y Diego, traerá consecuencias devastadoras para la Brigada, en una España secuestrada durante unas horas por un Teniente Coronel de la Guardia Civil.
Opinión
Al libro que traigo hoy le tenía muchas ganas. Es el
cuarto protagonizado por la inspectora Candela Luque y se puede leer
perfectamente al margen de las tres anteriores. Se trata de una trama
independiente, aunque algunas de las características de los personajes, y estos
mismos tienen su historia y por tanto los podremos conocer más si hemos leído
las precedentes.
En esta nueva entrega, Candela Luque ya se ha
estabilizado en la Brigada Judicial, su carácter temperamental y su forma de
hacer las cosas ya es conocida por todos, y el Comisario Salgado, su superior,
la tolera e incluso le da suficiente margen de maniobra porque ya está al tanto
de cómo le gusta hacer las cosas.
A ella y a la joven inspectora Virginia les encargan
investigar un homicidio, lo que hoy en lenguaje políticamente correcto se
llamaría un presunto caso de violencia de género. Una maestra, Esperanza ha
sido asesinada al parecer por su marido Ricardo Fontás, que aunque tiene una
coartada para la hora del asesinato, esta hace aguas porque quienes la
refrendan son sus amigos, y curiosamente en el vaso que este bebió durante la
partida que jugaban, no aparecen sus huellas dactilares.
Se necesita un arresto y a pesar de que el marido
jura y perjura que no fue él quien la mató, el caso casi se dará por cerrado
con su ingreso en prisión, a pesar de que oscuras sombras se ciernen sobre el
caso.
Al mismo tiempo los porteros del piso de Virginia, a
los que conoce de toda la vida se ven involucrados como víctimas en un caso de
abusos sexuales a menores. Un profesor del colegio al que acude su hija parece
ser el responsable, pero ellos se niegan a denunciar. Candela y Virginia
comenzarán a indagar por su cuenta lo que las colocará en una situación
comprometida a nivel profesional y laboral.
Como telón de fondo aparecen las divergencias
políticas y personales de una pareja amiga de Candela, Julia su amiga y su
compañero Manel, que se encuentra inmerso en un caso de tráfico de drogas. Lo
que parecía un idilio sin fin, por temas laborales lleva camino de convertirse
en un amor desgastado.
Una vez más la autora nos describe el trasfondo
histórico de una España de la transición, con una policía que intenta abrirse,
pero que sigue añorando los métodos de actuación del franquismo, y una sociedad
que de repente ve como un golpe de Estado planea sobre ella.
Las actitudes de los altos estamentos de la policía
y la justicia tal y como son reflejados en esta novela, hacen que se vean
numerosos paralelismos con la actualidad, y harán que Candela vuelva a
replantearse su futuro.
Se trata de un libro policiaco tratado de forma
sencilla, sin grandes giros argumentales, con una escritura limpia que hace que
resulte rápido de leer. He echado de menos algo de la fuerza de la protagonista
al principio de la saga, ese coraje que ha parecido ir diluyéndose con los años
en la Brigada, pero que permanece latente en ella, haciendo que desees una
próxima entrega.
Un reencuentro con un pasado relativamente cercano
con unas luchas que ahora nos resultan obvias, pero que resultaron muy
difíciles de ganar.
Saludos y a leer.