Título: Un traidor como
los nuestros.
Autor: John Le Carré.
Primera edición: 1
diciembre 2010
N.º de páginas:
400
Género: Novela
negra, espionaje.
Autor
topo, El honorable colegial y La gente de Smiley. Finalizada la Guerra Fría, le Carré amplió el horizonte de su narrativa, hacia una escena internacional que incluía el tráfico de armas y la lucha contra el terrorismo. Sus memorias, Volar en círculos, se publicaron en 2016, y la última novela de George Smiley, El legado de los espías, apareció en 2017. Murió el 12 de diciembre de 2020.
Sinopsis
Dos jóvenes enamorados se encuentran en el oscuro sótano de una casa anónima en
Bloomsbury. En la misma habitación están sentados dos miembros del servicio de
inteligencia británico. Y quieren información.
La pareja Perry y Gail acaban de regresar de unas vacaciones
en el Caribe, donde conocieron al misterioso Dima, un millonario ruso que teme
por su propia vida. El hombre cree que sólo podrá salvarse con la colaboración
de Perry. Y Dima tiene dinero y está preparado para pagar lo que sea necesario.
El encuentro impulsará a Perry y Gail en un viaje terrorífico desde Londres a
París y hasta una casa segura en las profundidades de los Alpes suizos. Cuando
hay tanto dinero en juego, y el gobierno británico lo reclama con tanta
urgencia, algunos sacrificios, aunque supongan una o dos vidas, tendrán que
llevarse a cabo…
Opinión
La reseña que hoy traigo me sirve para reflexionar
sobre varias cosas, cómo pueden variar los gustos lectores y cómo un escritor
puede tener novelas muy buenas y otras que no…que mejor no. De este autor me
leí casi todo hace ya unos años, pero a partir de un momento ya no…se me acabó
el feeling y creo que ya para siempre, aunque nunca se puede decir de esta
agua no beberé ni este libro no lo leeré.
Gail y Perry
una pareja inglesa joven y bien situada deciden tomarse unas vacaciones por
todo lo alto en el caribe en la isla de Antigua, allí se dedican a tomar el sol
y a la buena vida, y Perry que es un apasionado del tenis va a acabar jugando
con un extraño personaje que está siempre rodeado de una no menos extraña
familia. Se trata de un millonario ruso, Dima, su esposa Tamara,
siempre vestida de negro y siempre rezando, su hija, Natasha, un
bellezón al que le encanta leer y dos pequeñas que parecen haber adoptado, ya
que sus padres han sido asesinados, así como toda suerte de parientes que los
acompañan a todos sitios.
Con la excusa de celebrar una fiesta sorpresa para los
pequeños les hacen una encerrona con el fin de ofrecerles un trato. Que ellos
se pongan en contacto con el servicio secreto británico, para pedir asilo
político y protección para Dima y su prole a cambio de contar todo lo que sabe
acerca del blanqueo de capitales y tráfico de armas, tráfico de drogas y
chanchulleos de lo más variopinto ejecutado de las altas esferas de su país.
Dima se siente continuamente vigilado y amenazado y ha visto en ellos el correo
perfecto para sus pretensiones.
Obviamente Gail y Perry están asustados pero su
sentido del deber y la pena que les producen los pequeños hace que intenten
encontrar el enlace, y ahora están en el sótano de una casa encubierta en
Bloomsbury intentando sacarlos a todos de su país.
En un juego de espionaje, contraespionaje, movimientos
de poder dentro de los mismos servicios secretos, miedo, amenazas y violencia
soterrada irán intentando hacer el intercambio.
La trama, estupenda, el inicio bastante consistente y
entretenido…pero el problema aparece cuando comienza a enlentecerse y a
contarnos la vida de los agentes secretos y sus motivaciones, que se empieza a
volver soporífero, luego de repente vuelve a coger ritmo, vuelve a decaer y
llega un final que parece que le hayan dicho al autor termina que nos vamos. Y
así te quedas con una cara de idiota bastante considerable y un montón de cabos
sueltos que no se atan por ningún lado, y con la sensación de que te han
estafado.
Tengo que reconocer que empecé bien, reconocía
perfectamente la forma de escribir del autor, pero desde que vuelven a Gran
Bretaña y empiezan a hablar con los agentes del servicio secreto británico,
comenzó a ralentizarse el ritmo, comenzó a contarme cosas que no me interesaban
para nada y estuve a punto de cerrar el libro, no podía con él, pero tenía mi
honor en juego…y tenía una casilla en blanco en mi Yincana Criminal y tenía que
terminarlo, y lo hice. Olé por mí.
Lo que me ha resultado más reseñable es la enorme
crítica que hay hacia los grandes conglomerados financieros, de cómo se puede
crear un banco, mover el dinero de un continente a otro, de isla a isla
situadas en paraísos fiscales sin que ni siquiera una simple placa de latón
deje constancia de la sede de dichas oficinas. Curioso el caso de Chipre en una
de sus zonas, que no en la otra, se concentren empresas que mueven miles de millones
de euros, rublos y dólares. Otro caso que me ha resultado curioso es la forma
en que cuenta cómo la CIA compra prisioneros terroristas en Afganistán y les
venden cantidades ingentes de armas…y langostas del Golfo de México a los
señores de la guerra afganos. Una cosa muy loca.
En resumen, o eres muy fan del autor o te gustan las novelas de espionajes o si buscas mucha crítica hacia la hipocresía de todos los gobiernos podría ser tu libro, pero yo personalmente no puedo recomendarte que lo leas, me ha parecido un muermo, el pobre John tendría su contrato firmado, en su cabeza todo era muy interesante y no, al menos para mí no.
Con esta novela relleno la casilla de: Es un caso de
espionaje que transcurre en cualquiera de los tres continentes, en las islas
enigmáticas de la #YincanaCriminal2021
Saludos y a leer mucho.
