Título: El rodar de un agua interminable
Autora: Sara Mañero
Editorial: Editorial Maluma
Primera edición: 16 de mayo de 2022
N.º de páginas: 496
Género: Narrativa, histórica.
Autora
En Mientras
sorprendan los días, su primera novela publicada, explora la aventura de
vivir un día a día a través de personajes cercanos, marcados por las
vicisitudes de nuestro tiempo. Casi al mismo tiempo se publica la
segunda, El sueño del árbol (Verbum, 2015). La tercera
Atrapando la luz. En el campo de la ficción, su primera novela publicada
es Mientras sorprendan los días (Hades, mayo 2015). El sueño del
árbol es la segunda y la
tercera Atrapando la luz, Todo a un tiempo
(2020) han sido publicadas en
Verbum.
Sinopsis
«Quisiera hablarte del mar, pero no puedo. Se me
olvidó cómo se mecen las olas. Sin embargo, aún recuerdo el sonido del agua al
rasgar las piedras de la playa en una despedida perpetua».
Con estas palabras Juana abre la novela, adentrándonos en los repliegues de una
memoria, cuyo eco resuena en otra posterior, la de Carmina, con la que se
entrelaza.
En el devenir de unos años convulsos, dos mujeres afrontan su mundo
desde la mirada de quien se niega a ser mero testigo, y nos desgranan el
acontecer de sus siglos, el XIX y el XX, hasta fundir su historia con la
Historia.
Dos mujeres, dos épocas, dos destinos divergentes y un juego de espejos que
acaba por confluir de manera insospechada. Dos conciencias de mujer, cada en su
tiempo, en un fluir similar al de ese mar que tanto añora una de las
protagonistas y que invita a una reflexión sobre las raíces de nuestro propio
presente.
Opinión
Ya había leído a Sara en otras ocasiones y me fascina
su forma de escribir, de una forma sugerente, delicada y fácil consigue trasladarte
a otros mundos y otras épocas. Iba con las expectativas altas ante su nueva
novela y tengo que decir que no me ha decepcionado en absoluto.
Vamos a tener dos tramas temporales y no vamos a
enterarnos casi hasta el final en qué es en lo que confluyen, que une la vida
de estas dos mujeres tan diferentes, que van a ir creciendo, evolucionando al
par que unas épocas históricas llenas de eventos.
Por una parte, tenemos a Carmina, está llena de dolor y frustración por la muerte de su
abuela Carmen, de la que ha estado alejada durante años, por cabezonería de una
y de la otra, no vamos a saber el porqué hasta más adelante. El orgullo que
torpedeó una relación que podría haber sido estupenda. Leandra, la fiel amiga y consejera de Carmen, está destrozada y muy
enfadada con ella por no haberla dejado asistir a su entierro con la excusa de
la edad. A Leandra le da igual, compartió muchos años con Carmen y se merecía
darle su último adiós. Cuando aparece una chica con un manuscrito que le regaló
su abuela a su madre y desea devolvérselo, porque cree que ella debe tenerlo.
Prohibido contestar preguntas hasta que termine de leerlo. Carmina se enfadará,
pero le podrá la curiosidad.
Por otra parte, nos vamos a 1833, allí tenemos la
historia de una chiquilla, Xoana que
crece junto al mar, escucha su arrullo cada noche, sus aromas y a pesar de
trabajar desde pequeña en una casa donde las estrecheces son muchas, es feliz a
su manera, hasta que a los diez años sus padres deciden dársela a su madrina
que la pondrá a las órdenes de doña
Pilar, a quien tendrá que servir como doncella.
La ruptura y la frialdad con la que su familia acepta
su marcha, la marcará para siempre. Ya convertida en Juana y de su mano, acompañando a su tutora doña Pilar, que está
empeñada en que deje de ser una chica de pueblo y tenga una cierta cultura,
porque estarán al servicio de la Regente y la futura reina Isabel II,
entraremos de lleno en la vida de la corte.
Con esta protagonista se hace un muy ameno, al menos
para mí, paseo por la Historia de finales del siglo XIX. Hay un montón de
sucesos que parece que pueden estar ocurriendo ahora mismo, desde la epidemia
de cólera que azota Madrid y otros lugares (“mascarillas”, distancia), con los
miedos que imprime, los negacionistas de la época, los corrillos, las cuasi
fake news, (lo siento tenía que meterlo), esos rumores que corren por los
corrillos de las clases altas y de las bajas, las conversaciones de barra de
bar y salones, (el twitter de la época), las crisis, los políticos y sus
chanchullos, (no, no son nuevos), la subida descontrolada de precios, el tope
al precio del pan. Os juro que me ha resultado apasionante.
Sabemos Historia, la estudiamos, pero si una autora
consigue hilarla de esa forma tan particular es que te enseña muchísimo y
asistir a las intrigas palaciegas, a esas conversaciones tan interesantes entre
Juana y sus amigos, cómo la van haciendo madurar hasta llegar a escribir en uno
de los periódicos de la época, por supuesto bajo seudónimo, una mujer no podía
tener un papel tan relevante. Las censuras, lo peligroso que se vuelve todo,
los radicalismos se deslizan por sus líneas uniendo historia con la Historia,
hasta llegar…a ese mar que se dejó atrás, a un pasado que ya no vale y del que
solo queda la música sobre las rocas.
Con Carmina ocurre algo parecido, a ella la Guerra Civil
la pilló estudiando en París y enamorada de un franquista, veremos su punto de
vista, lo que le llega, y la brusca reacción cuando vuelve a casa de su abuela
que ha vivido la guerra desde otro lado, desde el hambre, desde el miedo, y
chocarán los ideales una y otra vez hasta que por el orgullo se rompa una
relación en la que se pierde lo importante de la vida. Y por supuesto a ella le
pasarán muchas cosas, vivirá dichas y decepciones y con ella también
aprenderemos mucho acerca de nuestra historia más reciente. Y por fin, sabremos
qué hay de unión entre las dos mujeres, las protagonistas.
La forma de escribir es mágica, con soltura y agilidad
consigue que realmente te transportes en el tiempo, a pesar de ser muchos los
datos históricos y el intenso trabajo de investigación, es una lectura fluida
que se me ha hecho corta. Una y otra vez mientras leía solo podía repetirme: un pueblo que no conoce su historia está
condenado a repetirla. Deberíamos asomarnos más al pasado para darnos
cuenta de que no hemos inventado nada nuevo, y que por desgracia los odios y
los rencores que están al orden del día, lo estaban ya desde hace siglos.
En resumen, dos historias de dos mujeres valientes por
más que ellas no lo crean, en dos contextos históricos muy diferentes, que te
harán plantearte tu realidad y tu novedad. Una novela de sentimientos, de amor,
de amistad, de pérdida, de orgullo y de saber seguir adelante, que os
recomiendo encarecidamente. Si os gusta la Historia vais a disfrutar sin duda.
“A lo mejor era
culpa mía, porque me exigía mucho para ser como yo pensaba que ella quería que
fuese.”
“Con la cantidad
de militares de café que tenemos, es muy fácil descubrir rumores y, a veces,
alguno es fundado.”
“Aquellos fueron
tiempos difíciles, tiempos en los que se transformó la historia, en los que
cada día parecía que pasaba algo relevante y nos levantábamos sin saber cómo
nos acostaríamos.” 1842-1844
Saludos y a leer, cada día más.