Autor: Benito Olmo
Editorial: Suma de Letras
Primera Edición: Mayo de 2016
Nº de Páginas: 360
ISBN:
9788491290360
Género:
Policiaca, Negra
Autor
Benito Olmo, nacido en Cádiz en 1980 ha trabajado como corrector, editor, columnista y negro, y es colaborador de varios medios como la revista Fiat Lux y el portal literario ¡A los libros! Es autor de las novelas Caraballo (2007) y Mil cosas que no te dije antes de perderte (2011), y con ellas bajo el brazo ha recorrido España a través de las diferentes Ferias del libro, lo que le ha permitido llegar a un gran número de lectores.
Benito Olmo, nacido en Cádiz en 1980 ha trabajado como corrector, editor, columnista y negro, y es colaborador de varios medios como la revista Fiat Lux y el portal literario ¡A los libros! Es autor de las novelas Caraballo (2007) y Mil cosas que no te dije antes de perderte (2011), y con ellas bajo el brazo ha recorrido España a través de las diferentes Ferias del libro, lo que le ha permitido llegar a un gran número de lectores.
Sinopsis
Empujado por el infortunio, el irreverente inspector Manuel Bianquetti se ve obligado a aceptar un traslado forzoso a la comisaría de Cádiz, un destino previsiblemente tranquilo que se verá alterado con el hallazgo del cadáver de una joven de dieciséis años. Una muerte violenta que le traerá reminiscencias de un pasado del que no logra desprenderse.
A pesar de la oposición de sus superiores, el inspector Bianquetti emprenderá una cruzada solitaria para atrapar al culpable siguiendo el rastro de unas evidencias que podrían no existir más allá de su imaginación. La realidad se va oscureciendo en la medida en la que el lector va devorando páginas al tiempo que participa junto al protagonista en la investigación de un caso cada vez más turbio y escabroso.
A pesar de la oposición de sus superiores, el inspector Bianquetti emprenderá una cruzada solitaria para atrapar al culpable siguiendo el rastro de unas evidencias que podrían no existir más allá de su imaginación. La realidad se va oscureciendo en la medida en la que el lector va devorando páginas al tiempo que participa junto al protagonista en la investigación de un caso cada vez más turbio y escabroso.
Opinión
El libro que traigo hoy me ha tenido parte del
verano salivando por las esquinas y es que solo leía buenos comentarios acerca
de él, y un detective con una trama negra en Cádiz era algo a lo que no me
podía resistir. Cuando por fin me lo dejó una buena amiga, desbordaba
satisfacción por los cuatro costados.
Nuestro nuevo detective el inspector Manuel Bianquetti ha sido desterrado a Cádiz desde Madrid, donde hasta hace poco había
sido un reputado policía, pero algo pasó, algo que hizo que él se extralimitara
y tuvo que cambiar de destino forzosamente. Así ahora pulula por los sótanos de
la comisaria de Cádiz con tareas administrativas de las cuales se escaquea con
bastante arte, porque a nadie le interesa enfrentarse con este gran individuo
malencarado.
Cuando Clara,
una joven sudamericana aparece violada y asesinada en un contenedor, el
inspector pijo y guaperas al mando va a lo obvio y detiene al novio de la
víctima con el cual ya había tenido una pelea por celos, un desenlace rápido y
eficiente, prácticamente caso cerrado, pero Bianquetti no se lo cree, su
instinto le indica que ese muchacho no ha sido capaz de llevar a cabo ese
asesinato, así que sin consultar y saltándose a la torera gran parte de la
burocracia, comenzará una investigación paralela a la oficial, con el fin de
exculpar al chico y encontrar al verdadero culpable.
Y lo va a hacer con métodos poco ortodoxos, dejando
un rastro fácil de seguir, porque el bueno de Manuel, no es precisamente
alguien que pase desapercibido, es un gigantón al que resulta difícil olvidar.
A la vez vamos a leer otra trama totalmente
diferente, angustiosa y tremenda, la de Cristina
una mujer asustada por no decir aterrorizada que ha sufrido malos tratos por
parte de su pareja que está en la cárcel. Ha tenido que rehacer su vida
prácticamente desde cero, ayudada por instituciones sociales que la controlan
en todo momento. Ha sido una lectura realmente dolorosa por lo actual y lo bien
que refleja sus sentimientos y sus miedos. Pero en ningún momento somos capaces
de ver qué tienen las dos historias en común, y en qué momento se cruzarán,
porque se supone que se deben cruzar, ¿no?
Mientras tanto ese elefante en una cacharrería que
es Bianquetti, va dando pasos de gigante en la resolución del caso lo que no les
hace ninguna gracia a sus superiores.
De modo que tenemos una novela policiaca del estilo
más clásico, con un detective rompedor, rebelde, indisciplinado, apático en un
principio pero tenaz y cabezota como él solo, y que por una vez tiene unas
dimensiones tan considerables que no pasa desapercibido, en un entorno lleno de
luces y sombras como es Cádiz, con una parte no apta para turistas pero
duramente real, y una trama absorbente que juega con los tempos y los
personajes, alternándolos en un baile pausado y elegante que llega a un final
muy bien trazado, creíble y lógico.
La terminas con una sonrisa en los labios y con una
sensación de nostalgia que te hace desear que el autor no abandone a nuestro
Bianquetti, yo ya lo he adoptado, y nos lo ofrezca en una nueva entrega.
A destacar el prólogo, que ya es en sí una auténtica
delicia, el caramelito con el que nos va a engatusar desde el principio.
Francamente recomendable, no creo que defraude a
nadie al que le guste el género.
Saludos y vamos a leer.