Título: Los muertos no
saben nadar
Autora: Ana Lena Rivera
Editorial: Maeva
Ediciones
Colección: Maeva
Noir
N.º de Páginas: 480
Primera edición: 2021
ISBN:978-84-1818424-6
Género: Policiaca, negra
Autora
Ana Lena Rivera nació en Oviedo en 1972. Estudió Derecho y Administración de Empresas en ICADE, en Madrid. Después de veinte años como directiva en una gran multinacional,
cambió los negocios por su gran pasión coincidiendo con el nacimiento de su hijo Alejandro. Junto a él nació también Gracia San Sebastián, la investigadora protagonista de su serie de intriga. La primera entrega, Lo que callan los muertos, recibió el Premio Torrente Ballester. Un asesino en tu sombra es su segunda novela.
Sinopsis
En pleno mes de diciembre, en la playa de San Lorenzo
de Gijón un niño encuentra el brazo amputado de un hombre en el agujero del
muro donde guarda sus tesoros. El brazo pertenece a Alfredo Santamaría, que
estaba siendo investigado en la comisaría central de Oviedo por una presunta
estafa piramidal. El jefe de la Policía del Principado asigna el caso al
comisario Rafael Miralles. Gracia San Sebastián, investigadora de fraudes
contratada por la policía para indagar en las finanzas de la víctima, tiene que
desentrañar un complejo entramado de blanqueo de dinero en el que interviene un
poderoso grupo de mafiosos rumanos sin escrúpulos. En su vida personal, la
relación con Rodrigo sigue viento en popa para disgusto de su exmarido, Jorge,
que viene de visita desde Estados Unidos para gestionar un ambicioso proyecto
empresarial.
Opinión
La novela que hoy traigo ha sido ganada en un concurso
para una lectura conjunta del grupo #SoyYincanera, a quien doy
gracias por haberme dado la oportunidad de leer esta tercera entrega de las
novelas protagonizadas por Gracia San Sebastián, así como a la autora y
a la editorial.
En este caso, el jefe de Policía del Principado de
Asturias, Mario Menéndez Tapia, será el encargado de proporcionar el
primer contrato con Gracia como trabajadora externa a pesar de no
tenerlo nada claro. El comisario Rafael Miralles, amigo de Gracia, ha
sido quien lo ha convencido a pesar de sus reticencias y las pocas ganas de
pagar un sueldo a alguien externo a la propia policía. El caso que le toca
investigar es el de una empresa inmobiliaria llamada InverOriental, al parecer
podría tratarse de una estafa piramidal inmobiliaria y quien está al cargo es Alfredo
Santamaría.
Una húmeda tarde de diciembre una familia está en la
playa de Gijón, uno de los hijos va a su rincón secreto y además de las
baratijas que habitualmente esconde se encuentra nada más y nada menos que con
todo un trofeo, con un brazo seccionado. Cuando se hacen los análisis oportunos
por el equipo forense, comprueban que precisamente el brazo sin cuerpo es del
señor Santamaría. Tienen el brazo, pero no el cuerpo y no tienen ni idea de
dónde puede estar, la cosa se complica cuando también aparece una pierna. No es
nada agradable pensar que van a seguir apareciendo trozos de persona por las
playas. No es bueno para el turismo, como bien se encarga de matizar Adela, la
carismática madre de Gracia.
A partir de ese momento el caso adquiere una dimensión
más peliaguda porque tras Santamaría, se encuentra la parte oculta de la
empresa, Levka Puscasu un mafioso rumano que intentará averiguar quién
ha sido el asesino para saber cuál es el motivo del asesinato y quién anda
detrás, por supuesto sus métodos son más expeditivos que los de los cuerpos
policiales.
Gracia se encuentra algo incómoda por su nuevo papel
en la policía, ella está acostumbrada a realizar su trabajo sin rendir tantas
cuentas, presentando solo los resultados de sus investigaciones sobre
defraudadores a la Seguridad Social. Aquí no le gusta sentirse fuera del caso
porque, aunque no lleva placa y pistola, le ha cogido el gusto a husmear y
sacar información.
En otra trama al margen tenemos a una parejita que se
despide tras haber pasado juntos la noche de San Valentín. Bajo una espesa
niebla Jacobo se ve obligado a despedirse de Arantza a unos metros de su casa,
le gustaría llevarla hasta la puerta, pero su padre un hombre prepotente y
posesivo se niega a que su hija salga con él. Por más que le pese la dejará
sola y no volverá a verla.
Estos son los mimbres de la novela en la que las
casualidades van a ir complicando el caso de forma extraordinaria, sobre todo
cuando la venganza sobrevuela sobre los personajes, mientras que el amor y la
amistad hacen el resto.
Gran parte de la historia, además, va a estar
protagonizada por la historia sentimental de Gracia, aquí quizá el que no haya
leído los dos libros anteriores puede sentirse un poco perdido, pero se da la
suficiente información como para ponerse en antecedentes. Ella ha comenzado una
relación más en serio con Rodrigo, quien le proporciona los casos de
estafas a la Seguridad Social que investiga, y al que no le hace ninguna gracia
que trabaje para la policía, y mucho menos en casos con cadáveres. Su marido, Jorge,
vuelve de Nueva York con la intención de firmar el divorcio antes de marcharse
a China donde su empresa tiene un gran futuro. Habrá unos malentendidos o no,
que pondrán las cosas más difíciles.
Con todos estos ingredientes se va a cocer a fuego
rápido una novela llena de intriga, con varias tazas de ingeniería financiera,
un buen bol de mafias y mafiosos, dos cucharaditas de ironía, tres cucharadas
soperas de lío amoroso, un vaso de artimañas casamenteras de Geni, la mujer de
Miralles, y la dosis justa de sal, pimienta y olor a mar que se va a filtrar
desde las playas de Gijón. Como tropezón especial, un cadáver bien macerado. Yo
el plato lo he disfrutado y lo he saboreado, no hay nada más sabroso que una
buena novela negra de origen asturiano, con cachopo de Adela incluido.
La ambientación es muy buena, los que conocen Gijón y
Oviedo la disfrutarán y reconocerán los pasos que por ellas dan los
protagonistas. Los capítulos que van alternando las distintas tramas y los
diálogos, ágiles y chispeantes hacen que dure muy poco en las manos.
En definitiva, una lectura amena, rápida, diferente,
con unas investigaciones poco habituales que analiza las estafas piramidales,
las mafias y prácticas mafiosas, con casualidades que pueden poner un caso
patas arriba, y en la que, aunque parezca imposible, las piezas van a ir
encajando a pesar de todo y de todos, hasta la última página. Seguro que os
sorprende, yo os la recomiendo, me ha gustado mucho y se nota la evolución a
más por parte de la autora.
“Para todos era más conveniente perseguir
al que evadía capitales o defraudaba al fisco para no pagar impuestos que al
que los pagaba por legalizar un dinero que, de otra forma, ni siquiera existía
en el país.”
“Uno puede arrepentirse de las cosas que
ha hecho, pero eso no le da derecho a irrumpir en la vida de los demás y
ponerlo todo patas arriba.”
Saludos, seguid leyendo y cuidaos mucho. Ya queda
menos.
Siempre #Seguiremosbailando