Título: Intemperie
Autor: Jesús Carrasco
Editorial: Seix Barral
Colección: Narrativa Breve
Número de páginas: 224
Año de edición: 2013
ISBN: 9788432214721
Género: Ficción contemporánea.
Autor
Jesús Carrasco nació en Badajoz en 1972 y en 2005 se trasladó a Sevilla, donde reside en la actualidad. Desde 1996 trabaja como redactor publicitario, actividad que compagina con la escritura. Intemperie le ha consagrado como uno de los debuts más deslumbrantes del panorama literario internacional. La novela, que ha tenido una entusiasta acogida en las mejores editoriales extranjeras antes incluso de su publicación en España, se editará en trece países.
Sinopsis
Intemperie, escrito por Jesús Carrasco, es un libro emocionante, conmovedor, lleno de suspense, un debut literario con alma de clásico. La riqueza de Miguel Delibes y la fuerza de Cormac McCarthy fundidas en una voz propia. Una novela construida a partir de tres arquetipos: un cabrero, un alguacil y un niño, simbolizan el bien, el mal y la inocencia. Una voz nueva, con personalidad propia, sin duda el autor revelación del año de la narrativa española.
Un niño escapado de casa, escucha, agazapado en el fondo de su escondrijo, los gritos de los hombres que le buscan. Cuando la partida pasa, lo que queda ante él es una llanura infinita y árida que deberá atravesar si quiere alejarse definitivamente de aquello que le ha hecho huir. Una noche, sus pasos se cruzan con los de un viejo cabrero y, a partir de ese momento, ya nada será igual para ninguno de los dos. Intemperie narra la huida de un niño a través de un país castigado por la sequía y gobernado por la violencia. Un mundo cerrado, sin nombres ni fechas, en el que la moral ha escapado por el mismo sumidero por el que se ha ido el agua. A través de arquetipos como el niño, el cabrero o el alguacil, Jesús Carrasco construye un relato duro, salpicado de momentos de gran lirismo. Intemperie es una novela tallada palabra a palabra, donde la presencia de una naturaleza inclemente hilvana toda la historia hasta confundirse con la trama y en la que la dignidad del ser humano brota entre las grietas secas de la tierra con una fuerza inusitada.
Opinión
Un niño escapado de casa, escucha, agazapado en el fondo de su escondrijo, los gritos de los hombres que le buscan. Cuando la partida pasa, lo que queda ante él es una llanura infinita y árida que deberá atravesar si quiere alejarse definitivamente de aquello que le ha hecho huir. Una noche, sus pasos se cruzan con los de un viejo cabrero y, a partir de ese momento, ya nada será igual para ninguno de los dos. Intemperie narra la huida de un niño a través de un país castigado por la sequía y gobernado por la violencia. Un mundo cerrado, sin nombres ni fechas, en el que la moral ha escapado por el mismo sumidero por el que se ha ido el agua. A través de arquetipos como el niño, el cabrero o el alguacil, Jesús Carrasco construye un relato duro, salpicado de momentos de gran lirismo. Intemperie es una novela tallada palabra a palabra, donde la presencia de una naturaleza inclemente hilvana toda la historia hasta confundirse con la trama y en la que la dignidad del ser humano brota entre las grietas secas de la tierra con una fuerza inusitada.
Opinión
Este que traigo hoy es un libro que me llamaba la atención, tuvo un lanzamiento espectacular y todo el mundo hablaba de él, así que cuando por fin lo encontré en la biblioteca, lo cogí sin dudar.
Y entendí porqué. Es un libro arrollador, sobrecogedor, que te coge un pellizco en el estómago porque tiene a unos protagonistas tan vulnerables y especiales que se quedan contigo durante mucho tiempo.
Empezamos con un niño escondido, escuchando las voces de los hombres que lo buscan, envuelto en el aroma del miedo. De qué huye esa criatura que es tan terrible como no ya solo para fugarse, sino para estar escondido pasándolo mal durante tanto tiempo hasta que está seguro de que nadie está en los alrededores.
Su plan era escapar y perder de vista el pueblo, o sea realmente no era un plan, era una tremenda necesidad. Ya no podía más. Es cuando realmente empieza su camino, cuando se da cuenta de que en medio de esa tierra inhóspita no sabe qué busca, ni qué va a hacer, lo único claro que existe es el hambre, la sed y no volver.
En ese deambular tan desalmado en un paisaje árido y agreste le hace topar con un cabrero, un anciano decrépito de poco hablar que le ofrece justo lo que necesita en ese momento. Algo de comida y bebida. Y silencio, un silencio sin preguntas, sin reproches y una seguridad, no volverá al pueblo. Con esos ingredientes tan parcos se forma un lazo en la noche, que los unirá en un andar errático en pos de sombra y agua, en un verano sin fin.
El niño aprenderá a confiar y a ayudar en su trabajo al cabrero con un pacto humanitario frente a esos personajes que andan buscándole. Un padre que se vislumbra sombrío y un alguacil que comienza a dar escalofríos.
No hay nombres, ni referencias temporales y apenas diálogos lo que dota al texto de una crudeza quizá mayor que si estuviese más definido, al fin y al cabo se trata de algo que puede ocurrir siempre y en cualquier lugar. Sólo tenemos unos pensamientos infantiles, inocentes, llenos de miedo e inseguridad y la descripción de unos lugares amargos e inhóspitos.
El llano en el que trascurre la historia es un terreno castigado por la sequía, en un tiempo pretérito en el que sobrevivir está directamente relacionado con la tierra, los cultivos y la existencia de agua. Se fue el agua, y con ella se fue la vida, solo quedan despojos, ruinas. Todo gira alrededor de esto, no hay más margen que sobrevivir y esconderse de ese sol inclemente que quema la piel y la garganta.
Tampoco hay mucha acción, pero la que hay es de una fuerza arrolladora, violenta, brutal que te deja sin aliento. La aparición del alguacil resulta tan perturbadora que tienes que dejar de leer durante unos instantes, temiendo lo que puede venir a continuación.
Con un lenguaje cuidado y una increíble fuerza expresiva en las palabras y en su prosa, el autor nos aporta unas metáforas claras: el niño con su inocencia y su afán de superación, se amparará en el cabrero que aportará experiencia y protección, frente a un alguacil que representa la maldad y la opresión… siempre en busca del norte, sin mirar atrás.
Asombra que una historia tan sencilla aparentemente, tenga tal carga emocional y descriptiva. los sentidos se disparan. Olores, sonidos, ese amarillo y ese cielo azul con el sol implacable que hiere la vista.
Creo que no había bebido tanta agua como cuando leía el libro, y de cómo era consciente del recorrido que esta hacía por mi cuerpo y del valor de una sola gota derramada.
Realmente es un libro, que creo que puede llegar a convertirse en un clásico y un referente.
También soy consciente de que no a todo el mundo le va a gustar. Lo que sí que puedo asegurar es que se trata de una novela que no olvidaré.
Leedla.
Magnífica reseña Mari...cuando lo leí pasé por los mismos estados que tú...que desolación perfectamente narrada...
ResponderEliminarPepa Cid
Muchas gracias. Es tremendo como lo describe, hace magia con las palabras.
EliminarBesos
Por lo que cuentas creo que me podría gustar. No lo tenía presente, y parece estar lleno de emociones intensas. Me lo llevo, a ver cuando le hago hueco.
ResponderEliminarGracias por la reseña!
Un beso ;)
Emoción fijo, otra cosa son los gustos...
EliminarBesos
Lleva tiempo entre mis pendientes. Me alega ver que te ha gustado. A ver si me animo pronto con esta novela.
ResponderEliminarBesotes!!!
Ni te cuento...llevaba tres años esperándolo. Jejeje
EliminarBesos
Me gustó la aridez de la historia y me resultó original pero tanto adjetivo me resultó excesivo.
ResponderEliminarSí, supongo que hay mucho adjetivo para las descripciones, pero a mí no me han estorbado.
EliminarUn beso y gracias por pasar
La portada es horrorosa jajaj, pero no la descarto. Yo tb he leído opinionse muy buenas, e igual haga como tú, y me la pille de la biblio.
ResponderEliminarBesitos
A mi tambien me gustó mucho cuando la lei. Inevitable recordar a Miguel Delibes leyendo estas páginas.
ResponderEliminarLo tengo pendiente de lectura!
ResponderEliminarBesotes
Fantástica reseña, conseguiste atraer mi atención con este libro. Gracias por la recomendación.
ResponderEliminarUn beso ;)
Me la llevo. Después de tu reseña no me cabe duda que hay que leerlo. Al saco va.
ResponderEliminarBesos